5 jun 2013

Análisis de personajes de Fate/Zero (II): Equipo Saber

He vuelto de entre los muertos... para molestar a los vivos

Integrantes: Saber (Arturia), Emiya Kiritsugu, Irisviel Von Einzbern, Hisau Maiya.

Como no quiero necesariamente seguir paso a paso cada acción de la serie, iremos comentando poco a poco cada personaje.

En este equipo tenemos varios de los elementos claves del argumento: Emiya Kiritsugu, uno de los protagonistas principales; e Irisviel Von Einzbern, que es el contenedor del Grial.

Recordemos que todos los personajes están para apoyar a uno de los dos protagonistas, y en este equipo evidentemente todos los personajes apoyan a Kiritsugu: Saber es su contraimagen, Irisviel es su soporte emocional y Maiya es su instinto cazador. Kiritsugu en sí es la figura del colgado del tarot, la del sufridor porque así lo ha decidido.

Queriendo ser una especie de justiciero desde su inicio, es traicionado por su mismo padre cuando la magia que practicaba destruye el pequeño mundo en el que vivía, una isla del Pacífico. Él mismo mata a su padre como primera "heroicidad": el acto le marcará posteriormente y cerrará su corazón porque ha visto la verdad, ha visto lo que significa ser el "héroe" que tanto anhelaba. Probablemente de ahí también venga su poco respeto a la magia y a los magos en general. Lo acaba sufriendo otra vez cuando tiene que matar a su madre adoptiva.

Hasta encontrar a Irisviel, Kiritsugu se convierte en un mercenario que lucha al lado de Hisau Maiya. Ella representa para él la época en que no tenía nada que perder, y por lo tanto pudo tener en poca estima la vida. No era un héroe pleno, puesto que no tenía que responder ante nadie, no tenía la responsabilidad de la que sale el heroísmo.

Pero una vez es contratado por los Einzbern, descubre algo que no podrá olvidar: se enamora de su compañera, Irisviel, e incluso tienen una hija juntos. Todos los años de inactividad significan un peso y una nueva dimensión para el asesino, que debe volver a utilizar sus habilidades una última vez. En ésta, pero, conoce el miedo y la necesidad de proteger, y tiene unas responsabilidades a cumplir. Ya tiene todo lo necesario para ser un héroe.

Maiya será a partir de entonces el apoyo en el trabajo, una sombra de su pasado que le recuerda a días más simples pero que le recuerdan a una persona que, sin repugnarle, se ha distanciado mucho de ella, una persona que es necesaria pero que sabe que no puede confiar en ella, como han sido siempre los mercenarios. Tiene responsabilidades que su antiguo yo no entendería nunca.

No pueden hacer nada, y lo sabe, para salvar a Irisviel: está destinada a morir por la Guerra, y por eso intenta no interactuar mucho con ella, sobre todo hacia el final. Ella lo sabe, y tan solo saldrá a su encuentro para dar su apoyo emocional. La pareja se entiende y tiene una especie de mutuo acuerdo porque viajan hacia un objetivo concreto, definitivo. El objetivo los convertirá en héroes a los dos, en gente que pone por delante su objetivo ante su voluntad de huir, como bien se expone en una pequeña escena íntima cuando él le propone de escapar bien lejos.

Es interesante hablar un poco de Irisviel Von Einzbern. Es un homúnculo, un ente artificial, y como tal no tiene realmente una vida individual llena. Kiritsugu la cuidó y le enseñó muchas cosas, pero ella sigue siendo consciente de su condición: El amor maternal y su admiración a Kiritsugu son los dos únicos sentimientos reales fuertes que tiene.

Y es que Irisviel no es buena persona. No ha interaccionado ni ha vivido lo suficiente como para darse cuenta de tales conceptos, y tampoco se ha cansado a investigar: no es su papel. No es amable, desinteresada o atenta. Lo puede parecer a vista de otros, pero ella está solo cumpliendo su papel, y se le ven tintes interesados y egoístas en sus acciones. Se acerca a Maiya aprovechándose de que ella también adora a Kiritsugu, y envuelve la misión de custodia con un poco de sentimiento entre ellas para asegurarse su máxima protección. Incluso intenta parar al peor enemigo de Kiritsugu por el bien de su salud emocional. Finalmente, el personaje acaba siendo utilizado por el Grial mismo en la secuencia climática de la serie, como una personificación. Es entonces cuando nos preguntamos por la verdadera Irisviel, y vemos que no existía, que era un conjunto de cosas adecuadas para el momento en el que se encontraban, la crueldad de un personaje pensado para llegar al final de cualquiera de las maneras.

Finalmente, la relación más directa de personajes en este equipo es Arturia y Kiritsugu. Los dos son distinta cara de la moneda llamada "héroe". Des del principio no congenian nada bien, y a medida que avanza la historia no hace más que acentuar la diferencia entre los dos. No se hablan porque no habrá comunicación, y uno no cuenta realmente con el otro en un principio.

Arturia representa el gran justiciero, el gran héroe legendario, el honor y la gloria, el bien supremo... el mismo en que soñaba el pequeño Kiritsugu en su niñez, aquella de la que despertó para convertirse en un asesino desde el primer día. Kiritsugu vio desde buen principio la sangre y la destrucción que se crearon antes de disparar la primera bala. Pudo ver como se desmontaba todo su ideal cuando su primera prueba para hacer justicia fue matar a su propio padre. Y la aceptó, y desde entonces recorre el camino que siempre ha creído. El camino del héroe verdadero, un antihéroe trágico que intentará salvar siempre al mayor número de personas, porque es lo mejor que puede hacer. Saber, pero, no ha despertado aún. O sí, pero no lo recuerda. Entre la montaña de cadáveres que se ve en sus flashbacks, el rey de los caballeros se da cuenta por primera vez del poco honor y heroísmo de sus batallas.  Pero no parece recordarlo en esta batalla, y cada vez que habla del honor y de "lo que se debería hacer" hurga en la herida de Kiritsugu. No es de extrañar, pues, que tal como éste cerró las puertas a su "yo niño", las cierre también a Arturia.


El mismo Kiritsugu, finalmente, destruye todo sueño de la chica al encomendarle la destrucción de su objeto de esperanza, el Santo Grial. Aunque en su secuela ella entienda la razón y la intención de Kiritsugu, en aquél momento él rompe su preciado premio por un bien mayor. El paralelismo de la previsión y de la capacidad de ver por encima que tiene un adulto sobre un niño, cegado por una promesa, nos muestra por vez final la idea de la pareja: el sacrificio personal por encima del egoísmo, para así obtener  una vida virtuosa. Una idea muy japonesa de colectividad y de trabajo en equipo, antepuesta al heroísmo occidental, que se acaba mostrando en esta escena, y que anteriormente se había mostrado a Arturia romper varias veces.

1 comentario:

  1. Muy buen analisis man
    Solo quiero correjir un pequeño detalle sobre Irisviel.
    Me parece que te refieres a ella como un personaje 'malo'. Yo pienso todo lo contrario. En esta historia abundan personajes que no son del todo 'buenos' o 'malos', o que a pesar de ser calificables como uno u otro, acaban cometiendo terribles errores.
    Por ejemplo, Kariya, desde mi punto de vista, es un personaje bueno... o al menos empieza como tal. Su unico deseo es salvar a la hija de su amada, y evitar un final tragico para Sakura. Para ello, se sacrifica a si mismo en cuerpo mente y alma, literalmente. Es una exelente definicion de martir. Pero el dolor y la presion acumulada por todo un año sobre el, y el no haber sido capaz se retener el deseo de venganza, gatillo su propio final. Un final donde no solo no pudo salvar a Sakura, sino que acabo por casi matar a quien mas amaba; todo producto del odio. Y es que estaba lleno de odio. Odio hacia los magos; odio hacia su cuerpo casi descompuesto; odio hacia su propia familia; odio por Tokiomi, que le arrebato a su chica; odio hacia el destino le habia preparado una vida tan cruel; y por ultimo, odio hacia Aoi, que renego el ultimo sentimiento bueno que quedaba en el. ¿Puede alguien que solo alberga resentimiento por el mundo ser bueno?
    Yo digo que no hay una respuesta clara. Y asi como Kariya hay otros mas. Por ejemplo Rider fue un tirano; Saber, por mas bonito que se vea, disfraza al infiero llamado guerra bajo el honor y la gloria; Kirei busco toda su vida algo que llenara el vacio en su alma y solo cuando agoto todas las posibilidades, cedio a su propia naturaleza (es decir, es casi como si el mundo le hubiese negado la posibilidad de ser 'bueno').
    Y por supuesto Kiritsugu, el asesino que pretendia cargar todos los males de mundo si a cambio podia minimizar las guerras y el dolor. ¿Y como lo hacia? Matando. Matando una y otra vez. Que gran e ironica contradiccion.
    Bueno... yo venia a hablar de Iri -.- creo que me anduve pasando xD
    Ella era una buena persona. Aprendio de Kerry lo que habia en el mundo fuera del castillo, y tambien comprendio varios de los sentimientos humanos que por naturaleza no debia poseer. Por supuesto que estos eran pocos, y tal vez poco maduros tambien. Pero como yo lo veo, estos eran puros. Casi como los sentimientos de una niña pequeña de solo 9 años. Algo similar a lo que ocurre con Arcueid en Tsukihime.
    Y para terminar xs ...sobre la escena final entre Iri y Kerry, cuando el grial acaba por desbordarse. Quizas te parecio que alli se muestra la 'verdadera' Irisviel. Que tan solo era un artefacto con el unico proposito de tomar la forma del grial y que todo lo que antes hubiese vivido era solo un medio para llegar hasta ahi. Y en realidad asi fue concebida, pero el tiempo que paso con Kiritsugu no fue en vano y ella verdaderamente lo amo. La 'Irisviel' que se ve en aquella escena es tan solo la apariencia y personalidad de ella, que la voluntad del grial, manchada con Angra Mainyu, uso. Para ese momento, el contenedor del grial llamado Irisviel ya habia muerto.
    Anyway, asi es como lo veo yo xP siempre habran muchos puntos de vista. Saludos

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